La Semana por la Paz, es una iniciativa que nace en el año 1987, el marco de la celebración del Día Nacional de los Derechos Humanos, que se conmemora el 9 de septiembre. Durante estos días, se pretende visibilizar el compromiso ciudadano en la construcción de paz desde diferentes territorios (personal, familiar, emocional, comunitario, escolar, social y ecológico) y motivar desde la pedagogía y la comunicación una reflexión colectiva que afiance la territorialidad.
Desde entonces y durante 34 años de forma ininterrumpida, se llevan a cabo diferentes actividades alrededor del país, que de la mano de la Conferencia Episcopal de Colombia, entidades y organizaciones públicas y privadas y el sector educación, llegan a los diferentes rincones del territorio nacional para rescatar la memoria de las víctimas, promover la reconciliación, la paz territorial, la participación ciudadana y la equidad.
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La Universidad Santo Tomás, Sede de Villavicencio, como promotora de la transformación social responsable y un ambiente de justicia y paz, como lo reza su visión institucional, también se vinculó con esta celebración a través de diferentes actividades que durante cinco días vincularon a actores sociales y líderes de la región. En la agenda se contaron actividades como una Velatón por la paz, el Conversatorio: Reflexiones en torno a la política de Paz en Colombia, el Foro: La Paz es el Camino, la Presentación del libro: Construcción del proceso de Paz en Colombia, Eucaristías y diferentes actividades culturales, deportivas y de salud a las que se sumaron las comunidades de algunos sectores vulnerables de la ciudad y la región para vivir esta, la versión número 34 de la Semana por la Paz.
El lema de esta trigécimocuarta versión era: VERDAD QUE PODEMOS, como un llamado al aporte que todos los sectores sociales, económicos y gubernamentales podemos hacer a la construcción de una realidad mejor para quienes han vivido de alguna manera el flagelo de la guerra y para quienes quieren forjar un mejor futuro para las generaciones venideras.
La celebración, culminó con una Eucaristía desde la Palestra del nuevo Edificio Sol de Aquino con la compañía de Monseñor Oscar Urbina Ortega, Arzobispo de Villavicencio y una jornada cultural y deportiva con docentes, estudiantes e invitados especiales.
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